Los contadores inteligentes no son más rápidos que los contadores normales, pero sí más precisos a la hora de medir la cantidad de electricidad que los usuarios utilizan normalmente. Los medidores inteligentes son mucho más sensibles y precisos que los medidores mecánicos, y los medidores mecánicos antiguos se han utilizado durante mucho tiempo, con cierto desgaste y errores. Los medidores mecánicos antiguos requieren una cierta corriente de arranque. En el pasado, cuando se utilizaban algunos aparatos de bajo consumo (como desenchufar el enchufe, poner el televisor en modo de espera, cargar el teléfono, etc.), es posible que el medidor no funcionara.
Hoy en día, los nuevos contadores eléctricos se basan en la visualización del conteo de pulsos y son muy precisos. Incluso cuando el aparato esté en modo de espera y el enchufe no esté desenchufado, el medidor funcionará más rápido que antes. De esta forma, los vecinos sentirán que el contador corre más rápido que antes.
El departamento nacional de energía verificará todos los medidores de energía eléctrica de acuerdo con las normas pertinentes antes de su instalación. La verificación se realiza sin abrir el precinto de plomo del fabricante. Los medidores de energía eléctrica no calificados serán devueltos al fabricante y los medidores de energía eléctrica calificados recibirán el sello de verificación antes de ser instalados y utilizados por los usuarios. Esto puede garantizar mejor una medición justa, justa, precisa y confiable.
Por tanto, los residentes pueden utilizar los nuevos contadores de energía inteligentes con confianza. Para reducir el consumo innecesario de electricidad, se recomienda que cuando los electrodomésticos no estén en uso, apague la alimentación utilizando el método correcto y luego desenchufe el enchufe para reducir el desperdicio de energía y la pérdida de electricidad. Es responsabilidad de todos abrir recursos y ahorrar electricidad, y debemos comenzar con las pequeñas cosas que nos rodean.